El mundo de las cafeteras es muy extenso y variado, sin embargo hay una en particular que ha permanecido a lo largo del tiempo, y que cuenta con miles de adeptos, se trata de la cafetera Italiana o cafetera Moka, un artefacto que este año cumple nada más y nada menos que 90 años de existencia.
Historia de la cafetera Italiana
La historia de la cafetera Italiana o Moka se remonta al año 1933, para ese entonces la industria del café en Europa se encontraba en pleno apogeo, perfeccionando las cafeteras espresso que se hacían cada vez más populares en las cafeterías y restaurantes de ciudades y pueblos.
A pesar del boom de este tipo de cafeteras, en los hogares de las familias europeas no existía un producto simple que permitiera preparar un buen café de manera rápida y sencilla. Es entonces cuando aparece el visionario de Alfonso Bialetti, un ingeniero italiano que decidió crear una cafetera con estilo Art Deco que fuera fácil de utilizar y accesible a la economía de cualquier persona.
Cuando Bialetti lanza su cafetera al mercado, el furor fue tal que en poco tiempo prácticamente todos los hogares italianos de la época contaban con una cafetera Moka. De hecho, la practicidad, economía y rapidez de la cafetera italiana la convirtieron rápidamente en un artefacto indispensable en el resto de Europa y el mundo.
¿Por qué llaman Moka a la cafetera Italiana?
Desde su creación, la cafetera Italiana logró romper paradigmas en cuanto a la facilidad para elaborar un buen café, de hecho es capaz de preparar una infusión cuyas características organolépticas se asemejan al clásico espresso. Gracias a esto su popularidad creció como la espuma, posicionándose en el mercado con bastante rapidez.
Por otra parte, Moka es una ciudad de Yemen con una historia cafetalera que data de hace mucho tiempo; de hecho en sus tierras es donde se comenzaron a cultivar los granos de cafeto para preparar la bebida que hoy conocemos. Además desde sus puertos se enviaban toneladas de café a toda Europa.
Con estos dos elementos presentes, la cafetera Italiana fue nombrada como cafetera Moka, en honor a esta ciudad y a su aporte histórico al mundo del café.
El funcionamiento de la cafetera Italiana
La cafetera Italiana fue desarrollada en Aluminio, ya que es un material resistente, ligero y que conduce muy bien el calor. Posee tres cuerpos principales, la cámara inferior, un filtro o canasta en medio y un depósito superior en el que se recolecta la infusión. En términos generales su funcionamiento en muy sencillo, básicamente se coloca agua en la cámara inferior de la cafetera que estará en contacto directo con la fuente de calor, se añade el café en la canasta colocándola sobre la sección inferior, y finalmente se cierra la cafetera con firmeza para que no se salga el vapor.
Cuando la temperatura llega al punto de ebullición se forma vapor y aumenta la presión hasta el nivel que permite la subida del agua por el interior de la cámara atravesando el filtro o canasta de café, formándose la infusión que llegará hasta el depósito superior donde finalmente se acumula.
Es importante destacar que la cámara inferior posee una válvula de seguridad para permitir el flujo del vapor en caso de que algo se atasque del filtro, de esta forma se evita una explosión por exceso de presión.
Como dato curioso, en la medida que el agua dentro de la cámara inferior se va evaporando la cantidad de burbujas aumenta y la cafetera produce un sonido muy particular que es inconfundible para la mayoría de las personas que amamos el café.
Tipos de cafeteras Italianas
A pesar de que la cafetera Italiana es una sola, desde su invención en la década de los 30, este artefacto ha sido renovado en cuanto a diseño, estilo, materiales de construcción e inclusión de elementos innovadores.
Si bien es cierto que originalmente Alfonso Bialetti diseñó la cafetera Italiana en aluminio, en la actualidad es posible conseguirla en otros materiales como por ejemplo acero o en diferentes tipos de aleaciones de metal.
En cuanto a su estilo, la cafetera Italiana ha pasado por un proceso de transformación, que si bien es cierto mantiene su esencia primigenia, es indudable la apreciación modernista de los nuevos diseñadores, quienes hacen gala de su imaginación para recrear piezas que cautivan con un diseño audaz y vanguardista, como el realizado por Dolce&Gabbana, Brentwood, Luxhaus, Minos, Ariete, Gnali & Zani, Resnnih, Tiamu, entre otras.
Además, existen cafeteras italianas eléctricas cuyo funcionamiento es igual al de la original, solo que han sustituido el fuego por la electricidad y están automatizadas, de tal modo que muchas se pueden programar para que al despertarte ya tengas el café listo.
Así mismo, los diseñadores han creado cafeteras Italianas por inducción, que básicamente son como las tradicionales pero que funcionan con las placas de inducción instaladas en las cocinas modernas, como por ejemplo, la Bialetti New Moka, Monix Cream, Oroley, Godmorn, bonVIVO Intenca, y la Bialetti Musa, entre otras.
¿Cómo hacer un buen café en una cafetera Italiana?
Para empezar es importante mencionar que la calidad del café preparado en una cafetera Italiana dependerá del tipo de grano utilizado y la relación o proporción entre la cantidad de agua y café. De esta forma te aconsejamos que compres café en grano – en Cafés Bernal te lo podemos suministrar – y lo muelas justo antes de su preparación, así obtendrás todos sus aromas y el sabor será muy superior.
Por otro lado, utiliza las medidas exactas de café molido y de agua, ya que al no hacerlo corres el riesgo de obtener un producto muy fuerte y concentrado, o por el contrario muy ligero y aguado.
Finalmente, te aconsejamos llenar la cámara inferior con agua por debajo de la válvula de seguridad y ponerla a fuego lento.
Recomendaciones para utilizar la cafetera Italiana
Muchas personas recomiendan no lavar la cafetera Italiana con jabón, ya que podría cambiar el sabor del café; por eso es mejor utilizar agua y nada más.
Para obtener mejores resultados con este tipo de cafetera, es recomendable usar agua precalentada para elaborar la infusión, de esta forma se minimiza la exposición de calor sobre el café molido. En este sentido, también algunos aconsejan el uso de una toalla fría para cubrir la cafetera, ya que esta permite bajar la temperatura rápidamente.
La razón para utilizar agua precalentada en la cafetera Moka es que de esta manera podemos disminuir el tiempo utilizado para la elaboración del café, y así evitamos que se queme el producto, ya que en caso contrario corremos el riesgo de obtener una infusión con notas mucho más amargas de lo habitual.
Hay que decir, que este tipo de cafetera no permite la preparación de un auténtico café espresso, ya que no es capaz de producir la presión necesaria. En general, una cafetera Italiana típica sólo puede producir de 1 a 2 bares de presión, mientras que para elaborar un espresso se necesitan de 8 a 10 bares.
En cuanto a preparar el café con la tapa abierta o cerrada existe toda una discusión al respecto. Algunos afirman que es mejor hacerlo con la tapa cerrada ya que de esta forma se conservan mejor las distintas notas aromáticas de los granos; por otra parte están los que afirman que es mejor hacerlo con la tapa abierta para permitir la ventilación del café y que la temperatura no suba bruscamente.
Nuestra recomendación al respecto, es que pruebes ambas formas, ya que como dice el dicho: “en la variedad está el gusto”.
Por último, cuando utilices una cafetera Italiana no aprisiones el café molido en el filtro ya que se puede producir una obstrucción y por ende un mal funcionamiento de la misma.
0 comentarios